A la soledad que se le tiene tanto miedo, que hasta se le asocia con los locos: que si son psicópatas, que si están preparando una brujería, que si nadie los aguanta, o que si son tan raros que no pueden estar en compañía… yo me río.
Y me río porque se les olvida hablar de los investigadores, de los escritores, de los directores o grandes empresarios: todos ellos necesitan tiempo para pensar, para crear. Y sí, muchas veces están solos. Pero no solos de soledad, sino solos de gusto, de amor. ¡Sigue leyendo!
https://andaryego.blogspot.com/2022/10/reflexiones-soledad-o-porque-el.html
PD: Segundo texto sobre la soledad… ¡qué solo estoy! :-p Bueno… en mi defensa: ¡son distintos!
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En este recorrido que hago ocasionalmente para complementar mis textos, caí sobre una web: “The roots of loneliness project” donde, como siempre, los gringos se dan tiempo para hacer estadísticas de cuántas veces vuela una mosca sobre una mesa de madera de 1 x 1, en otoño, veranos e invierno… Pues acá se habla de la soledad. Tienen unas buenas estadísticas y datos que no sirven de mucho, pero te harán ver cómo la sociedad la califica, y en general le pone un tache.
Me preguntó que sería de Buda sin sus retiros, de Mahoma sin ir a la montaña, o hasta del mismo Simón Bolívar subiendo al Chimborazo para tener un Eureka libertador. Claro, seguro nos hubiéramos ahorrado muchos rollos, pero también seríamos unos soldaditos buenos para obedecer y callar… sí, prefiero a los locos solitarios.
Acá encuentras el proyecto: ( https://www.rootsofloneliness.com/ ), del que te dejo una imagen… ah! Más abajo, la canción de la soledad por excelencia. ¡Que suene fuerte!